Con total seguridad los has visto en anuncios de televisión o incluso en alguna que otra revista deportiva. Los electroestimuladores musculares se hicieron muy famosos hace un par de años, y hoy en día se siguen utilizando gracias a todas las funciones que pueden llegar a realizar. En esta guía te queremos enseñar en qué consisten, los diferentes tipos que puedes comprar en la actualidad, como también su funcionamiento para que tu estado de salud mejore.
Se trata de unos aparatos que se colocan en diferentes partes del cuerpo y que emiten una mínima corriente eléctrica que hace que los músculos se contraigan como si estuvieran ejercitándose. Existen muchos tipos diferentes de los cuales te iremos hablando más adelante, pero decirte que se trata de un mecanismo que se emplea tanto para fortalecer un músculo en concreto, como también para aliviar lesiones o incluso rehabilitar, siendo muy habitual encontrárselo en clínicas en la que practican rehabilitación a pacientes o incluso en centros de fisioterapia puesto que se ha visto que se obtiene grandes beneficios con su uso.
El funcionamiento de los electroestimuladores es bastante sencillo, puesto que se trata de impulsos eléctricos que son generados por un pequeño dispositivo y que puede regularse según el producto, como puedes ver en la web Preciosa.top existen modelos que tienen diferentes programas para generar impulso según el uso que quieras darle. La pequeña corriente eléctrica va a pasar desde unos electrodos hasta el sistema nervioso de nuestro cuerpo, haciendo que el músculo se contraiga. Los modos de estos aparatos hacen que cada cierto tiempo se realice una contracción y, por lo tanto, el músculo vaya trabajando. El movimiento de contracción y relajación es algo que nuestros músculos hacen de manera natural y que es lo que posibilita que podamos movernos.
Las ventajas del uso de electroestimuladores musculares son muchos, y es por eso por lo que suelen utilizarlos prácticamente en cualquier parte, como hemos mencionado con anterioridad.
El uso más habitual que se le da a este aparato es el de la pérdida de grasa. Hay que aclarar que aquella persona que tenga sobrepeso se le aconsejará que alterne un tiempo de uso de electroestimulación con ejercicios cardiovasculares, ya que esto hará que el conjunto ayude a perder más grasa. La máxima efectividad se vera en casos en los que el usuario tiene grasa localizada, por ejemplo, en los gemelos o en los bíceps y quiere definir un poco más el músculo.
Al contraer el músculo, se va a quemar calorías, por lo que también se conseguirá eliminar esa energía extra que tiene el cuerpo, por lo que puede servir incluso para mantener una dieta equilibrada, al reducir los excesos calóricos que hayas podido tener días atrás.
Una de las ventajas que vas a poder tener es que vienen muy bien para quitar contracturas del cuerpo. Si tienes la espalda dolorida y te encuentras los famosos “nudos” con un electroestimulador bien colocado y usado cada cierto tiempo, la contractura desaparecerá y tu cuerpo se recuperará con mayor rapidez. Además de esto, también se puede utilizar para recuperarte de lesiones y que tu cuerpo no se deteriore en el tiempo en el que no puedes moverte del sofá o de la cama. Uno de los principales problemas que tenemos cuando no podemos ejercitarnos es que nuestro cuerpo va perdiendo la forma y con la ayuda de estos dispositivos podemos seguir manteniendo nuestra musculatura en perfectas condiciones.
No todo van a ser bondades para la utilización de estos aparatos, ya que existen ciertas desventajas que queremos que conozcas antes de cerrar este artículo.
Hay personas que piensan que si lo usan durante horas su cuerpo estará más tonificado y también perderá toda la grasa que hay en su cuerpo, algo que no es así y que además puede provocar graves problemas. Se recomienda que se use con precaución y sobre todo, durante poco tiempo para no sobrecargar el músculo. Tienes que pensar que se trata de un entrenamiento como si usaras pesas, por lo que no se te ocurriría hacer 100 series de curl ni en broma.
Si sufres del corazón o tienes ciertas enfermedades es desaconsejable su uso y si realmente quieres ponerlos en práctica, tendrás que consultar con tu médico con el fin de que te ayude y guie para que no sufras ningún tipo de problema.
Por otro lado, tienes que seguir las instrucciones que vienen con el producto y colocar los electrodos en las partes o zonas del cuerpo para las que han sido destinadas, ya que de lo contrario, podrías sufrir una gran descarga que podría incluso acabar con tu vida, por este motivo, no intentes experimentar con estos electroestimuladores, puesto que, si por ejemplo se colocan en la cabeza o en la sien, podría provocarte daños irreparables en el cerebro.