Pueden no estar totalmente comprobadas o pueden ser directamente falsas, el caso es que hay un montón de pequeñas teorías que arrastra la "sabiduria popular" que no tienen nada de cierto. Aquí tienes cuatro muy comunes:
1º Todas la calorías engordan lo mismo
Falso, las que provienen de las grasas tienen una mayor probabilidad de acumularse en vez de consumirse. Si te limitas a sumar no te saldrán las cuentas porque kcal aportadas por un aceite, engordan más que kcal de pasta. La razón es que al cuerpo le cuesta más digerir los carbohidratos y proteínas que la grasa, y usa más energia ( calorías) en el proceso.
2º Para adelgazar una determinada zona hay que hacer ejercicios localizados en dicha zona
También es falso. Por muchos abdominales que hagas no conseguirás quitarte " el flotador" de encima, si tienes los brazos muy gordos no vale de nada matarte a hacer bíceps con unas pesas... Esos depósitos grasos son almacenes de energía y se van movilizando con un orden preestablecido genéticamente. Para vaciarlos hay que hacer ejercicios aeróbicos, que aumenten las pulsaciones durante un tiempo sustancial. El cuerpo comenzará a quemar primero la grasa que hay entre los omoplatos, luego de la zona abdominal, luego de la cara y por último de caderas y muslos, independientemente del ejercicio aeróbico que hagas. El orden suele variar ligeramente en cada persona y también dependiendo del sexo.
3º Determinadas combinaciones de alimentos te hacen perder peso
Esta teoría, base de las llamadas dietas disociadas, carece de fundamento alguno. Por separar la toma de carbohidratos de las proteínas no vas a conseguir que las calorías que aportas tengan menos tendencia a trasformarse en grasa, como si el cuerpo " tuviera que elegir" entre digerir una cosa u otra. Hay personas que pierden algo de peso con estas dietas por puero aburrimiento: si estás obligado a tomar solo carbohidratos, sin combinarlos, es probable que no acabes siquiera con la ración recomendada. Lo mismo ocurre con una comida exclusivamente integrada por proteínas... o combinas todos los nutrientes para lograr un aporte equilibrado y sano, o el resultado es poco tentador.
4º Una cena copiosa engorda más que una comida a mediodía igual de abundante
Falso. Esta es una teoría de las más extendidas, se dice que las calorías de la cena se transforman en grasa por que el metabolismo se ralentiza al dormir... y hasta dan ganas de creérselo. Lo que importa es el balance total diario que no parece haber influencia alguna en la cantidad de grasa acumulada y la hora del día en la que tomas los alimentos. Otra cosa, totalmente cierta, es que sea más saludable desayunar mucho y cenar poco, ya que evitas ir a la cama con el estómago en pleno proceso digestivo pero, los mismos alimentos, engordan igual a las 8 de la mañana que a las 12 de la noche. Si bien, tambien es verdad que si tomas hidratos por la mañana o al mediodía será más fácil que los utilices durante las actividades deportivas, o simplemente en tu actividad diária, y en cambio las proteínas te resultarán más provechosas por la noche por que durante las horas de sueño el cuerpo las utilizará para construcción muscular.